Socialismo
Un
socialismo revolucionario, bolivariano, cristiano, venezolano, del siglo XXI.
-Continuar
construyendo el socialismo bolivariano del siglo XXI, en Venezuela, como alternativa al sistema destructivo y salvaje
del capitalismo y con ello asegurar la “mayor suma de seguridad social, mayor
suma de estabilidad política y la mayor suma de felicidad” para nuestro pueblo.
El socialismo frente a capitalismo
Chávez
nos deja en desarrollo un socialismo revolucionario y venezolano para el siglo
XXI. Ha puesto sobre todas las cosas el valor de la vida, la solidaridad, el
ser sobre el tener, desde los propios valores: bolivarianos, cristianos y
socialistas; humanistas. Tempranamente manifestó su visión crítica contra el
capitalismo, el Fondo Monetario Internacional y el sistema imperante de los
medios de comunicación. Y se propuso seguir avanzando en la plena satisfacción
de las necesidades básicas para la vida de nuestro pueblo: la alimentación, el
agua, la electricidad, la vivienda y el hábitat, el transporte público la salud, la educación,
la seguridad pública, el acceso a la cultura, la comunicación libre, la ciencia
y la tecnología, el deporte, la sana recreación y al trabajo digno, liberado y
liberador.
Socialismo cristiano
Lo
dice muy bien Antonio Rangel C.: “El sentido religioso del
Comandante pudo conciliar la religión católica con la práctica revolucionaria
constructora del socialismo porque extrajo las virtudes y valores humanos
concentrados en la doctrina católica como elementos aplicables a la revolución y
a los revolucionarios. Predicó la necesidad de la verdad, el amor, la
honestidad, el fiel cumplimiento de los compromisos como virtudes
indispensables para la revolución añadiendo siempre que no puede existir
revolución sin justicia social tal como lo predicó Jesucristo. Hizo hincapié
tesonero en la necesidad de concentrar todos los esfuerzos y todos los recursos
para atender al necesitado, al desvalido, al desprotegido como lo promulgó su
“Comandante Jesús de Nazaret”… Supo además, con sabiduría, incorporar en tales
conceptos a todas las religiones del humano porque no existe religión alguna
que deje de predicar las virtudes morales contenidas en el sentimiento
espiritual, parte sustancial de la estructura del ser humano más allá de la
profesión de cualquier fe religiosa. Chávez logró bajarle el tono a la
discusión entre creyentes y no creyentes en lo religioso para unificar
criterios en la búsqueda de la justicia social”.
Socialismo igualitario
Aquí
presento sólo algunos de los logros más destacados. En el área económica,
durante los gobiernos de Chávez se logró el crecimiento del Producto Interno
bruto (PIB) que pasó de 0,3 % en 1998 a 18% en 2004, 10,3 en 2005 y 2006, 8,4%
en 2007. El desempleo que era un indicador negativo para 1998, en el 2009 cerró
por debajo del 11%. El índice de Desarrollo Humano (IDH), que es un indicador
de un conjunto de variables (educación, salud, empleo, esperanza de vida,
etc.), pasó de 0,60 en 1998 a 0,80 en 2009, que es ya un índice alto de calidad
de vida, comparable con países desarrollados. La esperanza de vida de los
venezolanos que para 1998 era de 72,16 en 2009 llegó a 73,76. El Coeficiente de
Gini en 1998 estaba ubicado en 0,498, y para 2012 llegó a 0,394, ubicándose
así como el más bajo de América Latina (medido de 0 a 1, el 0 indica la menor
desigualdad). Desde el año 2001 a 2011, el número de hogares pobres bajó de
2.063.664 (21,6%) a 1.216.498
(17,6%). Mientras que el número de hogares con pobreza extrema pasó de 742.205
(11,3%) a 482.00 hogares (6,9%). Todo ello como consecuencia de una
creciente inversión social, que reactivó las condiciones de buen vivir de los
venezolanos, tan maltratados por el esquema de desinversión impulsado por las
políticas de reajuste económico impulsadas por los organismos multilaterales (Banco
Mundial, Fondo Monetario Internacional).
Las
políticas públicas, expresadas en las llamadas “Misiones Bolivarianas”, han
sido exitosas en la reducción de la pobreza y el analfabetismo. La pobreza se
ha reducido desde un 21% en 1998 a menos de 7% en 2013 y los analfabetos
pasaron de ser 1,5 millones en 1998 a representar menos del 2% de la población
venezolana en 2010. La UNESCO declaró a Venezuela libre de analfabetismo.
Socialismo como poder comunal
Chávez
afirmó: “Éste es un programa de transición al socialismo y de radicalización de
la democracia participativa y protagónica. Partimos del principio de que
acelerar la transición pasa necesariamente por,valga la redundancia, acelerar
el proceso de restitución del poder al pueblo. El vivo, efectivo y pleno
ejercicio del poder popular protagónico es insustituible condición de
posibilidad para el socialismo bolivariano del siglo XXI”. Así describió el
proceso: el “pueblo organizado” va asumiendo la gestión de la comunidad y la
administración de los recursos financieros. “Nosotros somos lo nuevo, la
democracia participativa y protagónica: en ninguna parte está dicho ni así ha
sido que eso vaya a debilitar a los gobiernos estatales, regionales o
municipales, al contrario, necesitamos gobernaciones que apoyen el fortalecimiento
del poder popular”. “Poco a poco tenemos que ir instalando el nuevo modelo y
desplazando al régimen capitalista, para eso se requiere mucho pensar, mucha
conciencia y mucho poder popular y un gobierno de verdad socialista y gobiernos
estadales socialistas y gobiernos locales socialistas y gobiernos comunales
socialistas”. Sobre este asunto se fueron realizando experiencias más o menos
exitosas y se fueron aprobando leyes. Es una tarea pendiente de profundizar.
Hay
más temas a seguir reflexionando aún para la construcción de un socialismo
nuestro americano del siglo XXI: el papel del Estado en la economía, en la
educación; las empresas de producción social, el desarrollo de las comunas, el
control monetario y la nacionalización de la banca, entre otros.